En China, la acupuntura es una técnica de medicina tradicional heredada de generación en generación, y sus beneficios nunca han sido puesto en duda, pero al introducirse en Occidente, la acupuntura pasó a formar parte de la medicina complementaria.
La medicina tradicional China, explica como funciona la acupuntura, basada precisamente en el concepto de energía vital llamado qi, y dado que esta energía fluye a través del cuerpo y puede ser influenciada y balanceada estimulando determinados puntos específicos del cuerpo, los cuales están ubicados a lo largo de canales de energía, que conectan todos los órganos vitales del cuerpo.
La explicación en Occidente para el funcionamiento de la acupuntura, indica que los puntos que se busca estimular, son áreas del cuerpo con una sensibilidad eléctrica específica. Al introducir agujas en dichas áreas se estimulan varios receptores sensoriales que, a su vez, producen estímulos nerviosos y transmiten impulsos al sistema hipotálamo-hipofisiario en la base del cerebro. La glándula pituitaria y el hipotálamo son responsables de la liberación de endorfinas y neurotransmisores, hormonas naturales del cuerpo humano que funcionan como analgésicos.
Por lo tanto, el proceso que comienza con el estímulo de una zona específica del cuerpo, concluye con la liberación de hormonas que alivian el dolor.
Otro efecto adjudicado a la acupuntura, es la regulación de la serotonina en el cerebro, neurotransmisor que juega un papel muy importante en el estado de ánimo y el humor, por lo que se utiliza para tratar la depresión.
Algunos de los efectos fisiológicos más comunes observados luego de una sesión de acupuntura, son el alivio del dolor, la mejora de la circulación, la reducción de la inflamación, la disminución de espasmos musculares y un aumento de los linfocitos, lo que estimula al sistema inmunitario.
COMO ES UNA SESION DE ACUPUNTURA?
En la primera sesión, se realiza la historia clínica, con examen físico completo e interrogatorio de síntomas y antecedentes médicos, además se incorpora el diagnostico de Medicina Tradicional China, y se necesita también saber hábitos, gustos y actividades.
Con lo anterior se construye un diagnostico clínico y energético. Sobre esta base, se arma el plan de tratamiento, el cual consiste en trabajar con agujas estériles (desechables), sobre los diferentes puntos y meridianos de acupuntura.
De ser necesario también se indican cambios de estilo de vida, nutricionales o fármacos.
Depende el tipo de patología, un tratamiento puede llevar una fase intensiva de entre 10a 15 sesiones y otra de mantenimiento de acuerdo a la necesidad.